lunes, 25 de septiembre de 2017

EL CARDO
Gabriela Mistral

Una vez un lirio de jardín (de jardín rico) preguntaba a las demás flores por Cristo. Su dueño, pasando, lo había nombrado al alabar su flor recién abierta.

Una rosa de Sarós, de viva púrpura, contestó:

—No le conozco. Tal vez rústico, pues yo he visto a todos los príncipes.

Tampoco lo he visto nunca —agregó un jazmín menudo y fragante—, y ningún espíritu delicado deja de aspirar mis pequeñas flores.

—Tampoco yo —añadió todavía la camelia fría e impasible—. Será un patán; yo he estado en el pecho de las grandes y mujeres hermosas…

Replicó el lirio:

—No se me parecería si lo fuera, y mi dueño lo ha recordado al mirarme esta mañana.

Entonces, la violeta dijo:

—Uno de nosotros hay que sin duda lo ha visto: es nuestro pobre hermano el cardo. Vive a la orilla del camino, conoce a cuantos pasan y a todos saluda con su cabeza cubierta de ceniza. Aunque humillado por el polvo, es dulce, como que da una flor de mi matiz.


—Has dicho una verdad —contestó el lirio—. Sin duda el cardo conoce a Cristo; pero te has equivocado al llamarlo nuestro. Tiene espinas y es feo como un malhechor. Lo es también, pues se queda con la lana de los corderillos cuando pasan los rebaños.



—Hermano cardo, pobrecito hermano nuestro, el lirio te pregunta si conoces a Cristo.

Y vino en el viento la voz cansada y como rota del cardo:

—Sí, ha pasado por este camino y le he tocado los vestidos: ¡Yo, un triste cardo!

—¿Y es verdad que se me parece?

—Solo un poco, y cuando la luna te pone dolor. Tú levantas demasiado la cabeza. Él la lleva algo inclinada; pero su manto es albo como tu copo, y eres harto feliz de parecértele. ¡Nadie lo comparará nunca con el cardo polvoroso!

—Di, cardo, ¿cómo son sus ojos?


El cardo abrió en otra planta una flor azul.

—¿Cómo es su pecho?

El cardo abrió una flor roja.

—Así va su pecho —dijo.

—Es un color demasiado crudo —dijo el lirio.
—¿Y qué lleva en las sienes por guirnalda cuando es primavera?

El cardo elevó sus espinas.

—Es una horrible guirnalda —dijo la camelia—. Se le perdona a las rosas sus pequeñas espinas; pero esas son como las del cactus, el erizado cactus de las laderas.

—¿Y ama Cristo? —prosiguió el lirio turbado—. ¿Cómo es su amor?

—Así ama Cristo —dijo el cardo echando a volar las plumillas de su corola muerta hacia todos los vientos.



—A pesar de todo —dijo el lirio, querría conocerle. ¿Cómo podría ser, hermano cardo?

—Para mirarlo pasar, para recibir su mirada, haceos cardo del camino —respondió éste—. Él va siempre por las sendas sin reposo. Al pasar me ha dicho: “Bendito seas tú, porque floreces entre el polvo y alegras la mirada febril del caminante”. Ni por tu perfume, oh lirio, se detendrá en el jardín del rico, porque va oteando en el viento otro aroma: “El aroma de las heridas de los hombres”.

Pero ni el lirio, al que llamaron su hermano; ni la rosa de Sarós, que Él cortó de niño por las colinas; ni la madreselva trenzada, quisieron hacerse cardos del camino del camino y, como los príncipes y las mujeres mundanas que rehusaron seguirle por las llanuras quemadas, se quedaron sin conocer a Cristo.



Taller sobre el texto

1. ¿Qué semejanza ve usted entre Cristo y el cardo?

2. ¿Qué lleva en lugar de una guirnalda de flores?

3. ¿Qué es necesario para seguirle y ser su discípulo? (Lc  9, 57-62).

4. Relacione (a-d) con las opciones □.


a. No le conozco                                
b. Ningún espíritu delicado deja de aspirar mis perfumes.
c. Yo he estado en el pecho de las grandes y mujeres hermosas.
d. No se me parecería si lo fuera.
e. Uno de nosotros sin duda lo ha visto.

Lirio
Camelia
                                     
Violeta                                                 
Jazmín

Rosa de Sarós




5. Responda las cinco preguntas (a-e) con las respuestas que comienzan con □.

 “Espinas”;
 “Flor roja”;
 “Echó a volar las plumillas de su colora muerta hacia todos los vientos”;
□ “Flor azul”;
□ “Haceos cardos del camino”
   
a. ¿Cómo son sus ojos?
b. ¿Cómo es su pecho?
c. ¿Qué lleva en las sienes por guirnalda cuando es primavera?
d. ¿Y ama Cristo? ¿Cómo es su amor?
e. ¿Cómo podría conocerle?


6. ¿Por qué el lirio no considera al cardo como de los suyos?

7. ¿Qué es lo que Cristo otea en el viento en lugar del perfume?


8. ¿Qué significa echar a volar las plumillas de su corola muerta hacia todos los vientos?

El placer de servir | Gabriela Mistral

EL PLACER DE SERVIR

Toda la Naturaleza es un anhelo de servir.
Sirve la nube, sirve el viento, sirve el surco.

Donde hay un árbol que plantar plántalo tú;
donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú;
donde hay un esfuerzo que todos esquivan, acéptalo tú.
Sé el que apartó la piedra del camino, el odio de los corazones
y las dificultades del problema.

Hay la alegría de ser sano y la de ser justo;
pero hay la hermosa, la inmensa alegría de servir.
Qué triste sería el mundo si todo en él estuviera hecho,
si no hubiera en él un rosal que plantar, una empresa que emprender.

No caigas en el error de creer que solo se hace mérito
con los grandes trabajos; hay pequeños servicios:
regar un jardín, ordenar unos libros, peinar a una niña.


El servir no solo es tarea de señores inferiores.
Dios, que da el fruto y la luz, sirve.
Pudiera llamársele así: El que sirve.
Y tiene sus ojos en nuestras manos y nos pregunta cada día:
¿Serviste hoy? ¿A quién? ¿Al árbol, a tu amigo, a tu madre?

Servir, ¡Oh Dios…! Tú que estás en este sol cálido; en el fruto.
Tú que unes cosas y hombres; que me has puesto
un corazón pronto al sentimiento, oye mi voz:
¡Que no hay guerra, llantos y temores!
Aleja el mal del alma de los hombres.

Quiero servir con mi ruego a todos los que luchan
y a todos los que esperan.
¡Si mi cuerpo no está presente, mi alma está con ellos!
Te ofrezco mis ojos húmedos mirando al cielo…
Mi boca fresca repitiendo este ruego…
¡que es mi modo humilde y sincero de servir hoy y siempre…!

Gabriela Mistral[1]





Análisis semántico del poema

1) Anhelo de servir significa deseo de servir. Naturaleza (con mayúscula inicial) es la personificación de todos los seres existentes. ¿En qué forma sirve la nube? ¿De qué manera lo hace el viento?
2) ¿Qué es un surco? ¿Para qué se hace?
3) ¿Por qué es necesario sembrar árboles?
4) Enmendar un error es lo mismo que…
5) Esquivar un esfuerzo significa seguir la ley del menor esfuerzo. ¿En qué situaciones se la sigue para evitar mucha dificultad?
6) Apartar el odio de los corazones equivale a ser portador de la paz. ¿Qué ventajas trae esto para los convivientes en una escuela?
7) Somos justos cuando…
8) ¿Por qué ser justo produce alegría? ¿Por qué servir también motivo de alegría?
9) Explique la afirmación: El mundo sería triste si todo en él estuviera hecho.
10) Servir a los demás, ¿es siempre señal de servidumbre o esclavitud? Dé ejemplos de personas cuya misión sea servir a los otros.
11) ¿A qué personaje religioso se le llama: “Siervo de los siervos de Dios”?
12) Gabriela Mistral afirma que a Dios se le puede llamar: El que sirve. ¿Qué servicios le debemos a Dios? ¿En qué forma cree servir la autora del poema? ¿Qué es servir con sinceridad?[2]




[1] Gabriela Mistral (Chile, 1889-Estados Unidos, 1957). Su verdadero nombre es Lucila Alcayaga. Fungió como profesora de escuela. Premio Nobel de Literatura en 1945. Poetisa cuyo tema principal es la angustia y la ternura que manifiesta a través de una rigurosa versificación. Entre sus obras están: Ternura, Lagar, Tala.
[2] Manual de Español 1(1975). Bogotá: Voluntad Editores. Col. Educación Creativa, pg. 82.

jueves, 21 de septiembre de 2017

Amienemigos | Marcos de Vasconcelos

AMIENEMIGOS
Marcos de Vasconcelos

Era muy lindo. Cuando supe que tenía enemigos, me fui a oír el sabio de las montañas porque era horrible tener enemigos.
Usted tiene enemigos porque es bonito. Sus amigos no le perdonan a la naturaleza que lo haya hecho así. Y, como la naturaleza es una cosa abstracta, les da rabia con usted (que es concreto) y se convierten en enemigos.
El hombre, entonces, se bañó con vitriolo y quedó deformado y feo.
Pero era inteligente y se enteró que todavía tenía enemigos. El viejo de las montañas le dijo:
Ahora, que usted es feo, ellos no le van a perdonar que sea feo e inteligente.
Guardó silencio para que no notaran su inteligencia. Los enemigos continuaron, porque era rico (fue lo que dijo el viejo de las montañas). Y se hizo pobre (lo cual fue muy fácil). Sin embargo, aún tenía enemigos.
Usted era bonito, inteligente y rico, y ya no lo es.
Pero ellos no le van a perdonar que hay sido todo esto y lo haya devuelto. Ellos son muchos.
Se mudó a las montañas. Pero, tenía enemigos. El viejo le dijo que ellos se enfadarían porque ya no tendrían más de quien pudieran ser enemigos. Permaneció, entonces, inteligente otra vez y, cuando se hizo rico, se ocupó de su fealdad y quedó bonito otra vez y vivió feliz, rodeado de enemigos.



Taller de interpretación del texto literario

1) El título del texto está conformado por la combinación de dos palabras:
a) Sinónimas.
b) Antónimas.
c) Homógrafas.
d) Homónimas.
e) Homófonas.

2) Los amigos se convirtieron en enemigos a causa:
a) De la gula.
b) De la envidia.
c) De la injusticia.
d) Del amor.
e) Del orgullo.

3) Los “amienemigos” no se rebelaron contra la naturaleza porque:
a) No la conocían.
b) Ella había sido magnánima con ellos.
c) No veían en ella a una rival.
d) Detestaban la injusticia.
e) Se autocriticaban.

4) El hombre se bañó en vitriolo, guardó silencio e se hizo pobre para:
a) Ironizar a sus amigos.
b) Satisfacer al viejo de las montañas.
c) Hacerse diferente de sus semejantes.
d) Conocer el lado negro de la vida.
e) No tener más “amienemigos”.

5) El viejo de las montañas simboliza:
a) Pobreza.
b) Orgullo.
c) Ambición.
d) Locuacidad.
e) Experiencia.

6) De sus tres cualidades, la única de la que él no podría realmente librarse era:
a) La riqueza, por ser un bien material.
b) La belleza, por ser un don divino.
c) La riqueza, por ser un atributo espiritual.
d) La inteligencia, por ser una facultad espiritual.
e) La inteligencia, por ser una característica física.

7) Para empobrecer, lo cual fue difícil, él se hizo:
a) Perdulario.
b) Tonto.
c) Ocioso.
d) Avariento.
e) Indolente.

8) Después de haberse afeado, empobrecido y silenciado, sus “amienemigos”:
a) Se convirtieron en amigos.
b) Lo consideraban demasiado tonto.
c) No le perdonaron la presunción.
d) Vivieron felices toda la vida.
e) No le perdonaron el desprendimiento.

9) Señale la frase que corresponde a lo que leyó:
a) A pesar de su feúra, siguió teniendo “amienemigos”.
b) Volvería a tener amigos si empobreciera.
c) Aunque no aceptara la opinión del viejo de las montañas, lo consultaba siempre.
d) Como volvió a ser inteligente, pasó a tener amigos.
e) Quedó tan feo, que sus amigos lo repudiaron.

10) Nuestro héroe fue feliz cuando:
a) Atendió a los amigos.
b) Dio oídos a la opinión ajena.
c) Dejó de tener enemigos.
d) Tuvo en cuenta las sugerencias del viejo de las montañas.
e) Dejó de lado las preocupaciones con las opiniones ajenas[1].

     

    






















[1] Silva, Antonio de Jesús da; Silva Rosa, José Ricardo da; Soares Leite, Roberto Augusto (1971). Português interpretação. Vol. 1, 4. a ed. São Paulo: Companhia Editora Nacional.

miércoles, 20 de septiembre de 2017

El hombre de 1.54 m | Marcos Vasconcelos

EL HOMBRE DE 1.54 M DE ESTATURA
Marcos de Vasconcelos

Un hombre, convencido de alto espíritu de solidaridad animal, liberó a un pajarito, el cual (según se confirmó posteriormente) era un genio encantado que, por elemental deber de gratitud entre los genios, le concedió tres pedidos. El primero era de atención inmediata y los dos restantes se vencerían en los plazos de 30 y 60 días garantizados por dos letras.

El hombre (que tenía 1.54 m de estatura) muy alegre y alborozado, pidió crecer.
El genio atendió el pedido, conforme lo habían acordado, y se fue. Y el hombre de 1.54 m quedó con 1.60 m y luego con 1.76 m y durmió con 1.80 m, radiante como nunca lo había estado antes pues siempre se había retraído, afligido por el complejo de su baja estatura. Cuando despertó tenía 2.30 m. Almorzó con 2.50 m, con mucho apetito, y cenó con 3 m. En breve creció hasta el segundo piso y luego hasta el quinto. Después sobrepasó los tejados. Treinta días después 53 m, según el topógrafo consultado, y estaba muy aprensivo a pesar de estar libre de su complejo. Venció, entonces, la primera letra y el genio volvió rigurosamente en el plazo fijado, como conviene a los genios.
Quiero disminuir. Quiero disminuir. Le pidió el gigante contrariado por estar en tanga y con mucho frío.
Quince días después el hombre había llegado nuevamente, sentía hasta cierto alivio, a su estatura de 1.54 m. Pero no paró ahí. Justo después tenía 1 metro y luego 50 cm.
El complejo volvió, entonces, más agravado. Con 30 cm vino el desesperó que aumentó cuando estaba en 15 cm, entró en pánico en el 55. o día cuando despertó con 8 cm.
La familia del hombre (gigantes de 1.54 m) le dio todas las garantías para que su desaparecimiento óptico progresivo no lo condenara a un desaparecimiento físico, pisado desastrosamente por un insecto casero o mordido por un microbio. Cuando el genio llegó, en el día indicado, como siempre, además, encontró al hombre de 1 mm muy desanimado, protegido por una campana de vidrio, de esas para proteger dulce.


Quiero que usted entre nuevamente en la jaula, gritó el hombre con voz débil. Vamos a empezar nuevamente todo sin mucha malicia[1].


Taller de interpretación del poema

1) La liberación del pájaro se vio motivada:
a) Por el espíritu de fraternidad.
b) Por la ambición desmedida.
c) Por el complejo de inferioridad.
d) Por el deber de gratitud.
e) Por el espíritu de aventura.

2) Ciertos pasajes del texto evocan a un conocido personaje infantil. ¿Cuál?
a) Robín Hood.
b) Aladino.
c) Robinson Crusoe.
d) Ali Babá.
e) Simbad.

3) El autor procuró adaptar la narrativa a los tiempos modernos. Con eso, en las relaciones entre el genio y el hombre, disminuyó el sentido de:
a) Amor.
b) Gratitud.
c) Alegría.
d) Esperanza.
e) Confianza.

4) La expresión que justifica la respuesta del ítem anterior es:
a) Atención inmediata.
b) Letras.
c) Campana.
d) Tres pedidos.
e) Complejo.

5) Antes de la atención del primer pedido, el complejo del hombre estaba motivado por la:
a) Inferioridad intelectual.
b) Superioridad animal.
c) Inferioridad física.
d) Inferioridad moral.
e) Superioridad física.

6) El día del vencimiento de la primera letra, solo sería posible saber la estatura del hombre si se hubiera llamado un:
a) Científico capaz de observar, con ayuda del microscopio, pequeños seres.
b) Especialista en describir y medir accidentes del terreno.
c) Especialista en la observación de los astros.
d) Alpinista.
e) Un cirujano especializado en deformaciones físicas.

7) Correlacione los estados del alma (síquicos) de nuestro héroe, con las gradaciones que, según el texto, los corroboran.
(   ) Aprensivo             a) 1.54 m (antes)
(   ) Alarmado                 b) 180 cm
(   ) Retraído                  c) 0.53 hm
(   ) Aliviado              d) 300 mm.
(   ) Desesperado             e) 0.08 m
(   ) Radiante                  f) 154 cm (después)

8) Al leer el texto, se comprende que hubieran sido innecesarias las letras. Esto porque:
a) Los pedidos eran de atención inmediata.
b) El genio no satisfizo los pedidos como lo esperaba el hombre.
c) La familia del hombre le dio todas las garantías.
d) El genio era puntualísimo.
e) El hombre estaba convencido de un alto espíritu de solidaridad animal.

9) Nuestro héroe quedó alborozado:
a) Por el aparecimiento del genio.
b) Por la posibilidad de liberarse de su complejo.
c) Por la hipótesis de verse libre de su complejo de culpa.
d) Por la liberación del pájaro.
e) Por el gigantismo que había adquirido.

10) Los familiares del hombre de 1.54 m:
a) Disminuyeron de tamaño mientras el hombre crecía.
b) Aumentaron de tamaño mientras el hombre disminuía.
c) Aumentaron de tamaño mientras el hombre crecía.
d) Mantuvieron su estatura.
e) El genio los atendió.

11) Señale la afirmación correcta:
a) Antes de la aparición del genio, el hombre era más alto que sus parientes.
b) Antes del vencimiento de la primera letra, el hombre consideraba que sus familiares eras unos gigantes.
c) Antes del vencimiento de la segunda letra, el hombre consideraba que sus familiares eran unos enanos.
d) Antes del vencimiento de la primera letra, el hombre se consideraba gigante en relación con sus familiares.
e) Después del vencimiento de la primera letra, el hombre se consideraba gigante en relación a sus familiares.

12) Al hacer el tercer pedido, el hombre reveló:
a) Sed de venganza.
b) Inteligencia y malicia.
c) Imbecilidad.
d) Complejo de inferioridad.
e) Incredulidad.
13) Se justifica la respuesta a la pregunta n. o 12 porque, al hacer entrar en la jaula al genio, el hombre:   
a) Se vengaría del genio, no lo liberaría más.
b) Perdería la oportunidad de vengarse del genio que tanto mal le había causado.
c) Volvería al tamaño normal.
d) Perdía la posibilidad de volver al tamaño normal.
e) Tendría la oportunidad de hacer otros tres pedidos más.



[1] Silva, Antonio de Jesús da; Silva Rosa, José Ricardo da; Soares Leite, Roberto Augusto (1972). Português interpretação. Vol. 3, 7. a ed. São Paulo: Companhia Editora Nacional.